domingo, 7 de febrero de 2010

Be Optimist my friend cuando todo este perdido...


el optimismo fallece poco a poco como una hoguera en medio de la lluvia, eso mismo es lo que se siente cuando el mundo poco a poco te lleva a situaciones difíciles de las que tienes que hacer de tripas corazón y salir de ahí. Situaciones en las que tu peor enemigo eres tu mismo, te preguntas una y otra vez como debes sentirte tras una noticia que te duele, tras tanto esfuerzo realizado en vano y tu propio interior no te responde. Luego hablas con la gente y te dice que esto son rachas, que las hay buenas y malas, les intentas creer pero sabes que no, que lo tuyo no es una racha, lo tuyo es un agujero en el que te has metido y tendrás que ingeniártelas para salir. A continuación llega el día, el momento más duro ya que la gente se interesa por ti y te pregunta lo típico, ¿Como estás? y claro tardas más de lo normal en contestar ya que si les dices la verdad puede que no se te despeguen en toda la mañana y luego para mas inri te perseguirán por las redes sociales preguntándote, así que les mientes, fuerzas una sonrisa y de tu boca sale una débil palabra..."bien". Llegará el día en que tendré que buscar nuevas dosis de la droga más buscada por todos el optimismo, eso si me costará un ojo de la cara...

2 comentarios:

  1. El optimismo no es un buen consuelo... ser optimista cuando todo te sale mal es engañarte. El pesimismo ayuda darte cuenta del error y mejorar.

    Un Saludo!

    ResponderEliminar
  2. eres un eterno ente pensante
    no deberias pensar tanto
    o si
    has de saber que nunca me gustaron las preguntas banales como "que tal"
    espero que bien iván
    alegría!

    ResponderEliminar